EL MISO, EL CONDIMENTO CURATIVO
Durante siglos, este condimento – el miso- ha sido considerado un alimento curativo en China y Japón.
El miso es una excelente fuente de proteína vegetal. Al fermentar la soja y un cereal (cebada o arroz), los aminoácidos esenciales se completan. Además, se digieren rápidamente y el organismo los puede metabolizar sin ningún problema.
El Dr. Akizuki, dice que, “desde un punto de vista fisiológico, la proteína animal fatiga los riñones; su putrefacción en los intestinos produce residuos tóxicos que perjudican el corazón, las arteria y el sistema nervios.
Asimismo, la proteína animal produce alergias y acidosis. En cambio, el Miso no las produce; más aún, ayuda a neutralizar la putrefacción causada por la proteína animal”. Además, el Miso no pasteurizado suele tener mayor número de enzimas y fermentos.
Es rico en minerales (como por ejemplo calcio, hierro y magnesio), vitaminas A, B y E y Ácido Fólico.